Estas tan penetrante, eres tan perspicaz, que la lujuria de mi mente danza en los aromas de la codicia.
Te sientes duro, lleno de fuerzas para darme lo que necesito. Te consideras el dueño de mi alma, de mi cuerpo , de mi cama.
Me abarcas en todos tus sentidos, te haces propietario de todo lo que tengo y también de lo que no.
Me involucras en ti, besandome mansamente, rozandome con tu lengua en cada escondite de mi cuerpo.
El ardor de las pieles cautivadas por la fogosidad y la exaltación de los besos. El tacto de los dedos perfectos, formando caminos que recorren el ultimo punto del cuerpo.
Desvistes no solo mi silueta, sino que desnudas mis deseos; sabes bien lo que quiero, y eso te hace feliz, te hace fuerte , macho...
Y yo me arrodillo en ti, me esclavizo a tus condiciones. No me das limitaciones, pues tengo el derecho de hacer lo que quiero, cuando quiero. Y es asi que me gusta tenerte al lado, desnudo no solo de cuerpo sino de alma.
Me miras, y esa mirada me enciende los sentidos, la maña de besarme con los ojos, logra quemi pecho se agite aun mas , esperando a que te desidas a terminar con esto...
...
...
...
El agite de tu cuerpo amenaza a que esto suceda nuevamente.